Castelló al mes

Restaurante Bergantín. Vinaròs

A bordo del restaurante Bergantín (Vinaròs)

 

Este mes nos desplazamos a Vinaròs, ciudad marinera, turística y siempre asociada a uno de los tesoros gastronómicos más representativos de nuestra provincia, el langostino. En la zona del puerto, junto a la plaza de toros encontramos el restaurante Bergantín, fundado en 1967 por la familia Albiol. Nos recibe Carlos Albiol Querol, maître del establecimiento, quien forma equipo junto a sus dos hermanas Inma y Cristina, a cargo de los fogones.

El comedor, con capacidad para 75 comensales está bien iluminado con grandes ventanales y decorado con detalles marineros. Las mesas amplias, vestidas con una mantelería blanca sobre la que encontramos el detalle de un centro de flores naturales.

 

La cocina de Bergantín es una cocina marinera, con productos de la tierra, una cocina de temporada donde destacan en la carta mariscos, arroces y pescados como la dorada y la lubina, pescados con caña, o el San Pedro y la escorpa. Además de los arroces tradicionales de nuestras costas, encontramos también algunos arroces curiosos como el de ortigas de mar y espardenyes, el arroz al cava, cocinado con pescados y mojado con cava o el arroz ciego en costra, variante singular del tradicional arroz en costra alicantino que se realiza con carnes.

Además de la carta cuenta con diferentes menús que oscilan entre los 22 y 45 euros y en los que siempre aparece el langostino como insignia de la zona.

Nos comenta Carlos que además de esta oferta, generalmente también cuentan con diferentes menús temáticos ya que participan en todas las jornadas que se realizan durante el año en la localidad: la de la galera, la del langostino, las del rancho marinero, de los arroces, de la fideuà, etc.

 

Nos sentamos a la mesa y empezamos:

 

Salteado de langostinos y rape sobre suave de puerros, concha de queso y gelatina de naranja.

En el interior de una concha crujiente de queso encontramos una base cremosa de puerro sobre la cual se sirve unos dados de langostino y rape salteados, acompañados con la gelatina de naranja, unos brotes de cebolla, chips de puerro y una brocheta de langostino envuelta en puerro. Este platillo es con el que participan en la jornada Tapa Tour langostino de Vinaroz.

 

Mejillones a la pimienta.

Excelente mejillón de roca, cocinado con abundante aceite de oliva virgen y pimienta blanca molida, sin más elementos que perturben el agradable sabor del mejillón, donde el aceite le aporta una untuosidad al molusco y la pimienta potencia en la medida justa el sabor del mismo.

 

Pulpo a la gallega.

Sobre una base de una crema parmentier se disponen las láminas del pulpo, terso en apariencia, pero que estaba perfectamente cocinado, sal gruesa y pimentón.

Ortiguillas de mar.

Servidas fritas, con un rebozado crujiente, contrasta con la textura gelatinosa y fluida de la ortiguilla, de sabor intenso a mar, a yodo, un delicioso bocado para los amantes de los sabores marinos.

 

Langostinos de Vinaroz.

Salteados con aceite de oliva, sal y en su justo punto de cocción, más no se puede pedir ni decir sobre este plato, solo que hay que ir a probarlo. Un bocado exquisito.

 

Arrossejat.

Riquísimo el arroz, sabroso, en su punto de cocción, con el grano suelto y la justa medida de aceite, un poco meloso y sin ningún tipo de colorante, pimentón u otros elementos que se le suelen añadir a los arroces para aportan sabor y color, solamente unos tropezones de sepia y calamar.

 

Degustación de postres.

Empezamos por un refrescante helado de limón cubierto de una capa de chocolate, una tarta de queso y arándanos y el más goloso de los tres, la tarta de chocolate y galleta, la de casa; postre que lleva con ellos desde los inicios del restaurante.

Bergantín es un claro ejemplo de esos restaurantes que respetan su zona y a la vez realzan las cualidades gracias a su buen hacer. Para los amantes de la cocina mediterránea y de los pescados y mariscos visitar este local es toda una experiencia para el paladar, sobre todo por la calidad de los productos. Navegar en este Bergantín vinarocense, donde sus tripulantes saben ajustar la buena cocina con un excelente servicio, es un auténtico placer.

 

Carta de vinos

En relación a los vinos, la carta se actualiza una vez al año, y Carlos se deja llevar por sus viajes a bodegas, gustos particulares y diferentes catas. Sin ser un sumiller profesional, se nota en la carta su inquietud por el mundo del vino, y por las novedades que aporta el mercado vinícola.

Tenemos ante nosotros una carta con un especial hincapié en los vinos catalanes, como pueden ser Priorat, Montsant, Terra Alta, Penedés, Costers del Segre y algunas más, tanto en blancos, tintos, rosados y espumosos. Se trata de una carta bastante amplia, sin dejar de lado el resto de los vinos de la Península Ibérica: Rioja, Ribera, Toro, Castelló, así como otras más, terminan de llenar la carta, sin olvidarnos de los espumosos de la D.O. Cava y la A.O.C. Champagne.

También tienen su lugar los espumosos de calidad de la Conca del Riu Anoia, que con su vino Raventós i Blanc, Blanc de Blancs nos sirvió para maridar nuestra agradable comida. Un cava afrutado, con las variedades macabeo, xarel.lo y parellada. Suave, con una acidez equilibrada, muy refrescante y con abundante burbuja.